Sustentabilidad y Educación

En esta ociasión les queremos compartir una reflexión de Leonardo Boff, sobre la sustentabilidad y la educación hacia Río+20, a celebrarse del 20 al 22 de Junio en Río de Janeiro Brasil. El artículo fue publicado en el blog Leonardo en 06/05/2012, esperamos sus comentarios.

Sustentabilidad y Educación

La sustentabilidad es uno de los temas centrales de Río+20, y esto no es ninguna coincidencia. Es resultado de un proceso de educación por el cual el ser humano sus relacione con el Universo, la Tierra, la naturaleza, la sociedad y consigo mismo dentro de los criterios de equilibrio ecológico, respeto y amor a la Tierra así como a la comunidad de la vida, de solidaridad para las generaciones futuras y de la construcción de una democracia sin fin.

Estoy convencido de que sólo un procesos generalizado desde la educación puede crear nuevas mentes y nuevos corazones, como avala la Carta de la tierra, capaces de hacer una revolución paradigmática exigida hoy en día por el riesgo global que vivimos. Como repetía con frecuencia Paulo Freire: “la educación no puede cambiar al mundo, sin embargo puede cambiar a las personas que van a cambiar el mundo”. Hoy todos estamos obligados a cambiar, no tenemos otra alternativa: o cambiamos o nos quedaremos en la obscuridad.

Aquí no cabe abordar la educación desde los múltiples aspectos tan bien formulados en 1996 por la UNESCO: aprender a conocer, a hacer, a ser y a vivir juntos; yo aumentaría el aprender a cuidar la madre Tierra y todos los seres vivos que habitamos en ella.

Lamentablemente este tipo de educación es insuficiente. La situación cambiante del mundo exige que todo sea ecologizado, esto es, que cada rama del conocimiento deba colaborar a fin de proteger la Tierra, salvar la vida humana, así como salvaguardar nuestro proyecto planetario. Por lo tanto, este saber ecológico debe atravesar todos los saberes.

El 20 de diciembre de 2002 la ONU aprobó una resolución proclamando los años de 2005-2014 como la Década de la Educación por el Desarrollo Sustentable. En este documento se definen 15 perspectivas estratégicas con miras hacia una educación para la sustentabilidad. A continuación me referiré a algunas de ellas:

•  Perspectivas socioculturales que incluyen: derechos humanos, paz y seguridad; equidad de género; diversidad cultural y entendimiento intercultural; salud; SIDA; y gobernanza global.
• Perspectivas ambientales que incluyen: recursos naturales (agua, energía, agricultura y biodiversidad); cambio climático; desarrollo rural; urbanización sustentable; y manejo integral de riesgos.
• Perspectivas económicas que incluyen: reducción de la pobreza y pobreza extrema; responsabilidad social empresarial; y rendición de cuentas.

Como podemos observar el pensamiento ecológico cruza todas estas disciplinas, de no hacerlo así no es posible alcanzar la sustentabilidad. Una vez que el paradigma del pensamiento ecologizado irrumpe nos concientizamos que todos somos ecodependientes.  Somos parte de una comunidad de intereses con los demás seres vivos con los que compartimos la biósfera, nuestro interés común básico es mantener las condiciones para la continuidad de la vida en la Tierra, en Gaia, este es el camino hacia la sustentabilidad.

A partir de ahora la educación debe obligatoriamente incluir las cuatro grandes tendencias de la ecología: la ambiental, la social, la mental y la profunda (aquella que discute nuestro lugar en la naturaleza). Cada vez son más los educadores que se apropian de esta perspectiva: educar para el buen vivir, que es el arte de vivir en armonía con la naturaleza, repartiendo equitativamente entre todos los seres humanos los recursos culturales y teniendo como modelo el desarrollo sustentable.

Debemos estar consientes de que no se trata a penas de introducir ciertos correctivos al sistema que creó la actual crisis ecológica, sino más bien educara para su transformación. Esto implica  superar la visión reduccionista y mecanicista que aún prevalece, asumiendo entonces una cultura de la complejidad. Aquella que nos permita ver las interrelaciones del mundo vivo y la ecodependencia del ser humano. 

Tal afirmación exige tratar la problemática ambiental de una gorma global e integral. De este tipo de educación deber derivarse una dimensión ética de responsabilidad y cuidado por el futuro común de la Tierra y de la humanidad. Reconociendo que el ser humano es el responsable de cuidad nuestra casa común y guardián de todos los demás seres vivos. Queremos que la democracia sin fin (Boaventura de Souza Santos) asuma las  características sociecológicas pues sólo así será adecuada en esta era “ecozóica” y responderá a las demandas del nuevo paradigma.

Ser humano, Tierra y naturaleza se pertenecen mutuamente, por eso es posible forjar un camino de convivencia pacífica, este es el verdadero desafío del educador en nuestro tiempos.

Fuente: Sustentabilidade e Educação